martes, 22 de septiembre de 2009

Preocupaciones

Hoy, en la charla que tuvimos mi esposa Ilehana y yo con nuestros amigos Liz y Víctor (quienes están proximos a ser papas) salio inevitablemente el tema de los hijos, tema por demás interesante para los que estamos en platicas de empezar una familia. Que si los gastos del embarazo, que si los malestares de la pobre mujer, que si el super gasto del parto etc, etc. Estos temas no eran nuevos para mi esposa ni para mi, solo que hoy los "sentimos" como si fueran nuestros por la amistad que nos une con Vic y Liz, pero lo que mas llamo la atencion del que escribe, fue el hecho de que ya teniendo un hijo, nadie tiene el "chip" de, como educar a un hijo y se aprende sobre la marcha.
Ojala Dios nos ilumine lo necesario y nos de la fuerza y sabiduria para ser buenos padres.
Hoy, solo eso me preocupa, lo demás son nimiedades.

2 comentarios:

  1. Gus yo que ya tengo la dicha de vivir esa experiencia te he de decir: cuando tu esposa esté embarazada (Primero Dios) te vas a sentir tan dichosamente felíz que todo se te irá dando de manera muy natural, pero absolutamente todo, además de que siempre existe el apoyo de la familia que te va guiando, y en la actualidad hay bastante información que dificilmente habría cuando nosotros nacimos, es decir, los padres de ahora ya tenemos un espectro más amplio sobre el tema que nuestros padres, yo más bien creo que en lo que realmente debes de preocuparte es en que pegue la vacuna mi hermano porque ya cuanto tiempo llevas con que te ibas a aventar...o también va ser como el maratón jajaja, (es broma no te enchiles) ojala ya pronto tengas esa dicha y verás que un hijo realmente te cambia la vida para bien, todo mi Gus, pero absolutamente todo se va dando de una manera hermosamente natural...saludos a tu esposa y a tí...ah y un consejo para ella: Ilehana si tu lapicero no tiene tinta...pues cambialo, jajajaja. es broma, es broma!

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  2. Bueno, pues ya sabrás que yo estoy en la parte inmediata anterior a tu situación actual, pero siempre he pensado que eso de ser papás es el exámen definitivo del tipo de persona que eres. Esto es, uno puede hablar todo lo bien que quiera de uno mismo (como incluso yo hago) pero a la hora de la verdad, son nuestros hijos quienes dirán la mera verdad de nosotros.

    Tu preocupación me parece genuina y plenamente justificada. Saludos!

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